No contentos con aquellos estrepitosos fracasos que aún hoy presentan un problema real para la ecologia australiana seguimos jugando con las leyes de la naturaleza. En este caso se trata de disminuir la población de canguros en los alrededores de Camberra por medio de anticonceptivos, escudándose en que "darle anticonceptivos es mejor que sacrificarlos" y pareciendo entonces como que en realidad les hacemos un favor, pues realmente "fueron los responsable del 70% de los accidentes relacionados con animales en el 2004", Que malos son los canguros ¿verdad?, ¿como se les ocurre cruzar las carreteras sin mirar?. Realmente son un peligro para la sociedad, como reza el artículo: "La población de estos animales triplica la de humanos en Australia, por lo que representan un peligro para la sociedad" (bonito razonamiento).
A lo mejor es interesante "dar la vuelta a la tortilla" y pensar en el crecimiento desmesurado que ha tenido la especie humana y en la forma en la que utiliza los recursos planetarios, comportamiento, que en ecología, se asimila al de los virus.
Entonces la lógica nos lleva a que quizás acabaríamos antes con los problemas matando a una parte de la poblacion humana, o utilizando métodos anticonceptivos a discrección, ¿o no pensarán eso los cnaguros?.
Pero bien pensado, ¿y eso a quien le importa?
ech
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